Esta intervención permite corregir el mentón retraído y proporcionar un aspecto más atractivo. A veces proporciona mejor equilibrio de las facciones faciales y a menudo se realiza simultáneamente con la cirugía nasal (rinoplastia).
Las personas que nacen con la barbilla mal definida pueden realizarse una mentoplastia para un mejorar el equilibrio de las facciones faciales. Hombres y mujeres que desean esta intervención suelen querer corregir el mentón retraído para ganar atractivo. En algunas ocasiones se realiza en personas con defectos congénitos. El aumento del mentón se suele combinar con la cirugía nasal (rinoplastia).
La intervención se realiza generalmente bajo sedación intravenosa (anestesia ligera), pero se puede usar anestesia local. Es una cirugía ambulatoria y los pacientes se recuperan en la comodidad de su casa unas dos horas después de la cirugía. Se realiza una pequeña incisión dentro de la boca y no se crean cicatrices visibles. Se selecciona y se coloca el implante de tamaño adecuado a través de la incisión y en la correcta posición. Las suturas son absorbibles.
Los implantes de mentón proporcionan una corrección permanente de la barbilla frente al retroceso y aumentan el perfil facial. Desde hace años se trata de una intervención quirúrgica segura y predecible. Se han colocado millones de implantes en todo el mundo, la mayoría de caucho de silicona o un material sintético poroso (Porex). Materiales similares se utilizan para el reemplazo de articulaciones y válvulas cardíacas. Existen en una amplia variedad de formas y tamaños. Durante la consulta personal el Dr. Turowski le ayudará a decidir qué implante es el más indicado en su caso particular.
Las molestias post-operatorias son mínimas y fácilmente controlables con analgésicos orales. Los hematomas suelen ser insignificantes, aunque puede aparecer hinchazón durante unos días. Se recomienda una dieta de alimentos blandos durante algunos días dado que la función de masticar será limitada.